La fuente señaló que el hermano separado de Harry, el príncipe William, es el presidente de BAFTA, por lo que los ejecutivos supuestamente sintieron que extender una invitación al duque y la duquesa de Sussex para el evento anual sería un error.
"Para ellos, extender la invitación a la alfombra roja a Harry y su esposa sería como hacer estallar una bomba nuclear. Es imposible", consideró la fuente, y agregó que el duque de Sussex "atacó rotundamente" a su familia en el documental de dos partes de Netflix, así como en sus memorias, Spare.
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La expectativa de que Harry, de 38 años, o Markle, de 41, hablaran sobre William, de 40, en el evento fue suficiente para mantenerlos fuera de la lista de invitados, según el informe. "Cualquier entrevista se volvería viral. Cualquier cosa negativa sobre William sería devastadora".
En cuanto a los portavoces de los BAFTA aseguraron al medio Page Six que "la asistencia de los duques de Sussex no se discutió en absoluto". La BAFTA Tea Party es un "elemento básico en el calendario de la temporada de premios de Los Ángeles", según el sitio web de la organización benéfica.
