En el libro, afirma que su hermano mayor, William, creía que el terapeuta que estaba viendo le estaba "lavando el cerebro". El duque de Sussex dice que su hermano estaba tan preocupado por lo que estaba expuesto en sus sesiones confidenciales que incluso pidió asistir a una.
Durante su visita a Open Door Charity, el príncipe y la princesa de Gales conocieron a varios adolescentes que usan las artes y la danza para ayudar con la salud mental. Kate les preguntó: "¿Ha ayudado producir música y participar en esos talleres? ¿Te ha ayudado con tu vida personal?"
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Fue un niño el que le respondió que usar la música como herramienta lo ayuda a expresar sus emociones a través de algo que disfruta. "Producir música y dejar salir lo que sientes es mejor que decirlo en una atmósfera clínica. Puedo ponerlo en palabras. ¡Eso fue difícil de explicar!", expresó el pequeño.
Kate soltó entonces su sorprendente afirmación: "Las terapias de conversación no funcionan para algunas personas, no son para todos. Es muy importante contar con una variedad de terapias. Todo el mundo está hablando mucho más sobre la salud mental. A menudo ha habido connotaciones negativas a su alrededor".
