La prueba de que esta promesa se ha cumplido cabalmente es el tiempo que los Middleton pasan con los duques de Cambridge. Es sabido que William disfruta pasar largas temporadas en casa de sus suegros.
Además, Carole Middleton es bien recibida en Kensington , donde frecuentemente va a cuidar a sus nietos George, Charlotte y Louis.

La relación es tan estrecha que, en algunas ocasiones, los papás de la duquesa han sido invitados a pasar algunos días en la residencia de la reina Isabel II, en Balmoral. Según algunos medios de comunicación, la monarca tiene una gran relación con Carole, quien ha acogido a William como un hijo, pues no pudo llevar una infancia con total normalidad por su condición de royal y la prematura muerte de su mamá.
