Los "seguidores" del subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud se vieron esplendidos y le regalaron un enorme ramo de rosas, un pastel y por supuesto que le llevaron mariachi para que le entonara Las golondrinas, gestos que conmovieron a la cara pública del Gobierno mexicano frente a la urgencia sanitaria.
Emocionado, López-Gatell también agradeció a la gente esta muestra de apoyo y prometió que seguirá trabajando para lograr que México supere este bache de salubridad, que enfrenta también el mundo entero: "Hasta que esto esté en orden y que la pandemia ya no sea una amenaza para el país, no nos vamos a cansar de hacerlo".
La explicación de por qué ya no se llevará a cabo la Vespertina es que —de acuerdo con información gubernamental— la epidemia lleva cinco meses a la baja en el país, la vacunación avanza a ritmo acelerado y 19 entidades están en condiciones de riesgo mínimo, además de que consideran un psoible agotamiento de la audiencia.
A pesar de esta acción, Hugo insistió en que la pandemia en México no ha concluido y hay que seguir tomando todas las medidas precautorias para evitar un rebrote; hizo énfasis en mantener los protocolos sanitarios en Yucatán y Quinta Roo, sitios en los que la intensidad epidémica de este momento se compara con el verano del 2020.
