Solucionado el tema de quién pondrá el dinero, ahora lo que "preocupaba" era saber en cuál empresa confiarían para poner en sus manos la seguridad de ellos y, más importante, la de su hijo Archie Harrison. Esa otra incógnita ya también tiene respuesta y es muy sorpresiva.
Han sido varias las causas por las que los duques de Sussex han que tenido que tomar medias extremas para resguardarse: la mansión en la que viven en Beverly Hills, propiedad del productor Tyler Perry, se encuentra en una colina y los paseantes podían ver algunos puntos sin problema, por lo que instalaron vallas opacas.

Pero eso no detuvo a los paparazzi, que entonces utilizaron drones para sobrevolar la propiedad, lo que acabó con la paciencia de Meghan y el príncipe Harry, y ahora han decidido que los servicios que contratarán para que se encarguen de hacerlos sentirse seguros son de los de mayor élite en el país.
Los duques de Sussex recurrieron a la misma compañía privada que resguarda a celebrities y a las 90 familias con los apellidos de más abolengo en el mundo, lo que significa que la factura no será nada barata. El príncipe Carlos tendrá que desembolsar seis mil euros diarios, de acuerdo con The Mirror.