El cargo por el que se intentó por segunda ocasión enjuiciar políticamente al ex titular del ejecutivo federal estadounidense sucedió el 6 de enero, cuando simpatizantes de Donald marcharon al Capitolio con el propósito de evitar que se diera la ratificación del triunfo en las elecciones al demócrata Joe Biden.
La insurrección dio como resultado cinco personas muertas, entre ellos un oficial de policía, durante el asedio a la sede del poder Legislativo de los Estados Unidos. Antes de que comenzará la votación, el líder republicano en el Senado, Mitch McConell adelantó que su voto sería de no declarar culpable a Trump.

A pesar de su voto, McConell explicó que "no hay duda" de que Trump es "en la práctica y en lo moral responsable de provocar" el agresivo y mortal ataque contra el Capitolio, sin embargo, era imposible que votara que es culpable porque "constitucionalmente ya no es elegible para ser enjuiciado", ya que no es más presidente sino un ciudadano común.
La votación llegó después de una semana de desarrollo del impeachment, que empezó el martes y se prolongó hasta hoy. En el arranque se escucharon argumentos de los dos bandos, además se realizó una votación en la que se decidió que sí es constitucional el juzgar a un presidente que ya no está en funciones.