Así fue el llamado a la paz de Ricky Martin en Mérida

La fiesta que Ricky armó en el concierto Yucatán For Peace, que cerró las actividades de la 17th World Summit of Nobel Peace Laureates, fue total porque incluyó un repaso por todos sus grande éxitos, incluso aquel en el que alza su voz para pedir conciencia sobre las problemáticas que enfrenta la niñez en todo el planeta, Asignatura pendiente.

El color de voz de Martín, solidario, se transformó rápidamente en uno que invitó a olvidar los problemas y dejarse llevar por el baile, la adrenalina y liberar la dopamina, incluso las personas que estaban al final de la calle Prolongación Montejo, y que sólo lo escucharon, quedaron conformes: “Estuvo perfecto”, le comentó un joven a su novia mientras caminaban cuando terminó el show.

La pasión desbordada de la gente fue agradecida por Ricky, quien calificó está noche como “mágica y especial, en la que bailan y yo también, pero sobre todo lo que me llevo es que luchamos por la paz y saber que nos acercamos a la igualdad, poco a poco, pero consistente”.

Entonces llegó el momento de ser solidario con la comunidad y lanzó, como lo hicieran antes Diego Luna, Miguel Bosé y Joy Huerta, la petición al Congreso local: “Qué viva el amor y el matrimonio igualitario, ojalá que lo podamos ver en esta tierra próximamente, sería un problema menos para los gobernantes”.

En su recorrido por todo su repertorio, cuando quiso “regresar al inicio de su carrera” con Te extraño, te olvido, te amo, sus seis músicos cometieron en un pequeño error e iniciaron otra canción; para cumplir su promesa, Ricky los detuvo y les pidió cambiar instrumentos. Luego de una disculpa con todo el charming posible, la música se reanudó hasta lograr una noche sencillamente ¡Rickysíma!