Lo único que se confirmó desde el palacio de Buckingham fue que la reunión había tenido lugar y que el matrimonio pudo platicar antes durante quince minutos con el príncipe Carlos, el papá de Harry, y su esposa Camila. Ni siquiera estaba claro si la pareja se quedó a pasar la noche como invitada de la soberana porque al día siguiente ya se encontraba en los Países Bajos lista para celebrar la inauguración de los Juegos Invictus.

Ahora el propio Harry compartió algunos detalles de la reunión con su abuela, que casualmente se produjo apenas unos días antes de que ella celebre su 96 cumpleaños, para aclarar que hablaron principalmente de la nueva edición del evento deportivo que él creó en 2014 para animar a competir a los veteranos enfermos o heridos en servicio.