“Solo salen de su casa para realizar obras de caridad. Pasan sus tardes en casa como familia. No han tenido ninguna visita”, aseguró la revista People.

La pareja ha aprovechado el tiempo de confinamiento para mantenerse tranquilos en su hogar y reconectarse como familia, eso sí, sin dejar de ayudar a los más necesitados. “Meghan dijo que quería mostrarle a Harry Los Ángeles a través de los ojos de la filantropía. Obviamente hay una gran cantidad de amor desinteresado entre ellos”, declaró Richard Ayoub, director ejecutivo de Project Angel Food.