Contra la decisión tomada por la jueza Ana Duro ya no cabe recurso alguno, por lo que la intérprete tendrá que sentarse sí o sí en el banquillo de los acusados. Sin embargo, hasta que no se produzca ese momento, la artista podrá seguir negociando con la fiscalía de cara a una posible rebaja del castigo, algo que parece poco probable a día de hoy.

Y es que la cantautora colombiana descartó de plano seguir hablando con el ministerio fiscal, ya que se niega tajantemente a aceptar su presunta culpabilidad.
La que fuera pareja del futbolista Gerard Piqué, con quien tiene dos hijos, emitió este verano un duro comunicado para acusar a la Agencia Tributaria de orquestar una campaña de descrédito contra su persona, además de recordar que abonó 17 millones de euros tan pronto como fue notificada de sus supuestas irregularidades.