Happy birthday: Scarlett Johansson never better… boda, bebé y premio por carrera

La emoción en la voz de Johansson y el inconfundible brillo en su mirada nos confirman que con la llegada de su segundo bebé, el primero al lado de Colin, está en uno de sus momentos más plenos, aunque eso no significa que no crea que está lista para más: "Estoy realmente a la mitad de mi vida y también de mi carrera", acepta.

Scarlett está convencida que con su nuevo matrimonio y ahora que llegó Cosmo, el hermanito para Rose —a quien tuvo al lado de su ex Romain Dauriac y está a punto de cumplir 7 años—, "aún no tengo todas las perspectivas para ser todo lo reflexiva que debería (con respecto a su vida)", expresa con una amplía sonrisa.

De lo que Johansson sí está segura es de que hoy más que nunca "estoy muy curiosa de mi vida, de mi trabajo, especialmente después de no haber trabajado el último año, durante todo lo que ha durado la pandemia y ha sido el periodo más largo que no he filmado, quizá en toda mi carrera, desde que era una niña".

Este alejamiento de los sets de filmación y con lo que está pasando al lado de Jost, y su segunda maternidad, insiste Scarlett "me tienen, de hecho, con muchísima mayor curiosidad de lo que he hecho, de lo que sé, de los que estoy haciendo y debo hacer, ha sido muy interesante, me cambió todo el juego, de la mejor manera".

Enamorada de Colin y de "la industria en la que crecí", dice, la actriz disfruta de su éxito, este noviembre recibió el American Cinematheque Award y se despidió del personaje al que considera como "uno de los más importantes" de su carrera: Black Widow, con una última cinta de Marvel Studios que la retó de todas las maneras posibles.

"El proceso de hacer una película es mágico. Tengo muy buenos recuerdos con Florence Pugh (su coprotagonista en su última aparición como el rol) de estar suspendidas en el aire a 30 pies de altura y conocernos mientras estábamos rodeadas en estos sets masivos con 300 personas. He hecho muchas cosas locas", finaliza Johansson.