Frente a la cámara, Mauricio Ortega confiesa que está arrepentido por haber robado dos jerseys pertenecientes al jugador de los Pats, así como un casco que el jugador de los Denver Broncos, Von Miller utilizó en el Super Bowl 50.
"Ahora entiendo que fue una especie de idolatría al juego, a los jugadores, y creo que se puede hacer sanamente. No tiene caso que se salga de control, ahora lo entiendo todo. Ahora que analizo lo que pasó, creo que esto es semejante o igual a una adicción, invertí demasiado en esos artículos y me obligó a querer más y más y querer lo que nadie podía tener, como lo es el jersey de Tom Brady", explicó Ortega.
Durante la entrevista, el exdirector editorial del periódico El Sol de México fue cuestionado sobre la decisión que lo llevó a robar, pero prefirió omitir la pregunta, limitándose únicamente a tratar de reiterar su arrepentimiento.
"Cuando salí del estadio sabía que se iban a enterar que fui yo. No por el jersey del Super Bowl LI, más bien por haber compartido fotografías del otro jersey que tenía. Sabía que lo que había hecho estaba mal", agregó.