Alexia Alexander: crear un monólogo a partir de los sueños frustrados

Este monólogo parte de sus experiencias y reflexiones personales en relación con su carrera. A partir de ello creó un personaje y exageró algunas de las situaciones para dramatizarlas. “Parte de mí, pero se convirtió en algo más. Hay una mezcla de ambas cosas”.

La iniciativa de este proyecto, respondió también a una tendencia en la industria del entretenimiento. Aquella que hace que actrices esperen a quedar en un casting y confiar que la historia vaya más o menos de acuerdo a los temas que les preocupen y les interesa plasmar en escena. “Si no te están dando los proyectos o los personajes que quieres pues hazlos tú”, explica.

Esta es una situación, piensa, de las actrices de una nueva generación que se considera más como creadoras. “Cada vez tenemos más cosas que decir o que queremos expresar. Rara vez nos vamos a quedar sentadas a ver hasta cuando nos llaman”.

El de la actuación es un medio complicado y relativamente cerrado. Los productores, reflexiona, cada vez toman menos riesgos y con “riesgos” se refiere a trabajar con personajes diferentes que puede que a la gente no los quieran tanto de un principio. Tampoco se arriesgan a encontrar actrices diferentes. “Yo soy de la idea de que uno tiene que encontrar nuestras propias historias y pues al fin de cuentas yo todavía tengo mucha hambre de actuar, de poder tener proyectos entrañables y que conecten con la gente y que alguien pueda leer este texto y ver esta obra y decir, yo he estado ahí”.

El teatro está vivo

Justo ese día acompañó a los técnicos a La Teatrería. Se sentó sobre el escenario y comenzó a medir ese espacio en el que siempre pensó que su monólogo debía representarse. Eran las 12 de la noche cuando Alexia llamó por teléfono a su hermana. Un ataqué de pánico se apoderó de ella. “No voy a poder hacerlo, no soy buena actriz, debo tirar la toalla”, fueron algunas de las ideas que pasaron por su mente.

Tener la autonomía sobre el proyecto le dio la certeza de saber que podía decir que no. “Puedo ser esa novia que a la mera hora se fuga y es igual de valiente; esa posibilidad de decir puedes decir que no y no pasa nada me dio mucha más paz. A partir de esa semana me sentía mucho más tranquila y mucho más emocionada”.

Así Robin Fly estrenó el 7 de septiembre pasado y desde entonces la obra se ha ido transformando con las reacciones del público. “Va a llegar un punto que esto lo haga de manera mucho más orgánica. Ir viendo que funciona con el público, que no, que le puedo agregar. Lo que tiene el teatro es que está vivo. Te nutre y te retroalimenta todo el tiempo y cada vez me siento más dueña del escenario, ya más en mi espacio y en mi lugar. Es mi casa”.

Robin Fly, escrita y protagonizada por Alexia Alexander, con la dirección de Xavier Villanova se presenta en La Teatrería (Tabasco 152, Roma Norte, Ciudad de México), todos los miércoles a las 21:00 horas, sólo por 10 semanas.