La Navidad de Meghan Markle y el príncipe Harry
“Anoche, estaba saboreando los restos de nuestra cena de Nochebuena, envolviendo algunos regalos de última hora y bajando de puntitas las escaleras con mi esposo para asegurarme de que ‘Papá Noel’ había disfrutado de sus galletas y que ‘los renos’ se habían comido sus zanahorias (cualquier cosa para mantener la magia de la Navidad en la mirada de nuestros hijos)”, contó Meghan sobre sus actividades navideñas.
Además, describió cómo planeaban pasar la Navidad: “Planeo pasar el día acurrucada con mi familia, tal vez en pijama todo el día, jugando un poco de Scrabble o Sequence (o Candyland para los niños) con música, velas parpadeantes, perros roncando, picoteando comida de forma interminable; las risas, las respiraciones profundas… la diversión y los recuerdos”.
Meghan concluyó con una calurosa felicitación: “Espero que, ya sea que estén en pijama como nosotros o vestidos de gala, en una gran reunión, con su pareja, sus hijos o solos, dondequiera que se encuentren leyendo esta nota hoy, les deseo una muy Feliz Navidad y todas las bendiciones que la acompañan. De mi familia a la suya, ¡Felices Fiestas!”.
La celebración de los Sussex contrastó con las tradiciones de la familia real británica, que mantienen rituales navideños arraigados en décadas de historia.
La Navidad de la familia real británica
El Rey Carlos III y la Reina Camilla encabezaron una vez más la tradicional misa de Navidad en la iglesia de St. Mary Magdalene en Sandringham, donde se reunieron miembros de la monarquía como los príncipes de Gales con sus tres hijos, George, Charlotte y Louis.
En el recorrido después del servicio, la familia real convivió con gente del pueblo que los esperaba emocionada y William, incluso, presentó a sus hijos a un admirador de la princesa Diana, un emotivo momento que rápidamente se viralizó.