Se trata de un ambiente casual, gracias a la decoración del lugar. La arquitectura está basada en el uso de concreto, madera natural, que reflejan un estilo moderno con un mural del artista Andrew Antonaccio. Cuenta con una terraza en la que se aprecia la exclusiva avenida Presidente Masaryk.
Establecido en Miami, Nueva York y la Ciudad de México su menú se alimenta constantemente con platillos que se distinguen de la oferta general, por el equilibrio en las preparaciones y conceptos. Una cocina de brasa que encuentra una contraparte llena de frescura aplicada en cada sección de su menú, desde sus entradas hasta su propuesta en la mixología.
La idea detrás de este restaurante que donde la mayoría de los platillos se cocinan a la leña, por ejemplo, sus inconfundibles baby back ribs en salsa, el short rib con soya dulce y ajo, el pork belly frito, el pulpo a la parrilla, o el pato. Pero además de la sección “smoked” del menú, entre mis favoritos están platillos como el crispy rice con atún o hamachi, las gyozas, el tataki de atún, entre muchos otros.
El protagonista es su menú pues ofrece platos asiáticos de distintos países como Corea, Japón, Tailandia o China que incluyen desde pescados crudos o cocidos, carnes y verduras hasta algunos mariscos.

Con una terraza de techo retráctil que expone los ángulos más seductores del arte que decora los salones y alimenta un ciclo de ventilación constante, KYU es uno de los sitios en cuya vibrante exclusividad, el visitante encuentra satisfacción a todas sus expectativas de seguridad, sabor y ambiente.