Aunque los insectos pueden llegar a ser fascinantes, la realidad es que también tienen la capacidad de poner en riesgo nuestra salud al ser transmisores de enfermedades, y en esta época, ellos buscan lugares calientitos para resguardarse como rincones, colchones, muebles y ropa. Las chinches, por ejemplo, aman los colchones y los muebles de madera, por eso es muy importante que estos lugares se mantengan vigilados y muy limpios.
