Cómo montar tu propio huerto y no fallar en el intento

Primero lo primero, los materiales básicos que necesitas para empezar son: una base de madera o barro o un hoyo en el jardín, tierra, abono, una pala y las semillas de tu elección. Ojo, las que mejor se dan en estos tipos de proyectos son: fresa, lechuga, tomate, jitomate, zanahoria, cilantro, tomillo, epazote y lavanda. Una vez que cuentes con todos los "ingredientes" mencionados, estarás listo para ponerte manos a la obra.

¡Es hora de plantar!

1. Escoge un lugar. La mejor recomendación que te podemos dar es elegir un espacio soleado para que crezcan sanos y con mucha vida.

2. Mezcla la tierra con el abono y ponlo en la base.

3. Entierra las semillas en la mezcla de tierra.

4. Riega. La idea es que la tierra este siempre húmeda para así llenar de nutrimentos a las semillas.

5. Espera con calma para que empiecen a germinar y posteriormente a que la planta crezca. Es importante recordar que cada semilla tiene tiempos diferentes. Un tip de la abuela: Si les platicas o les pones música, crecerán mejor.

Platicamos con una experta en el tema, Rosi Huerta, quien nos dio más recomendaciones y así hacer más eficiente la siembra:

• Utiliza cáscara de huevo como base. ¿Cómo? Debes hacer un hoyo en la cáscara y sacar todo lo que hay adentro, una vez que esté limpio, mete con mucho cuidado la tierra y la semilla y empieza a regar. Ya que haya crecido un poco, mete en tierra con todo y cascarón. Esto le dará mucho calcio a tu semilla y evitará la aparición de lombrices

• Cebolla. Si en tus planes está cosechar lechuga, será un gran acierto combinar cebolla con otras semillas pues el olor servirá para alejar cualquier tipo de plaga.

• Haz mezclas. Al combinar los cultivos, los beneficios serán mayores. No te limites a utilizar solo semillas de vegetales o de flores. Entre ellos comparten nutrientes y polenizadores que los ayudará a crecer más rápido. Plus: su olor natural refrescará el lugar.

• Asociaciones de cultivo. Existen combinaciones positivas y negativas, te compartimos un link donde podrás encontrar cuáles se dan mejor.

• Plagas. Los bichos que vemos dentro del huerto no siempre son malos, por ejemplo, las arañas o las cochinillas ayudan a eliminar las plagas. Respeta el ecosistema pero en caso de que haya muchas, trata de intervenir de manera orgánica.

Mientras hacíamos la investigación, encontramos una página con los huertos más increíbles y que puedes adaptar en cualquier espacio de tu casa: Pedacito de campo. Esta tienda tiene huertos de muchos tamaños y diseños que, seguramente, se volverán parte de la decoración de tu casa. Solo tienes que dar clic aquí para conocerlos.

Frienldly reminder: Así como los humanos, las plantas son seres vivos que necesitan comida y cuidado. No te olvides de consentir a tu huerto como a tus seres queridos.