Britney Spears y su papá, Jamie Spears se han mantenido en disputa continua sobre las consecuencias de la tutela que a él le dio control sobre las decisiones financieras, de salud y profesionales de la cantante, durante 13 años.
Finalmente, la llamada Reina del Pop se liberó de ella en noviembre de 2021; sin embargo, parece ser que pondrán fin a sus desacuerdos una vez que sus abogados estipulen sus propias condiciones.
Después de que el representante legal de Britney, Mathew Rosengart, rechazara previamente la propuesta del equipo de Jamie y Tri Star Sports and Entertainment Group para discutir temas que incluyen la demanda del abogado de la cantante de Gimme More contra su papá y la compañía, por presuntamente apropiarse de grandes cantidades de su dinero, se informó que las cosas han cambiado desde hace un mes.
De acuerdo con TMZ, Mathew ofreció poner fin a la disputa por una cifra de unos 7 millones de dólares, pero llegó a un punto muerto cuando se negó a explicar a los equipos de Tri Star y Jamie cómo había llegado a esa cifra.
Sin embargo, ambos están dispuestos a llegar a un acuerdo y una fuente dijo al medio que esta misma semana, el abogado de Britney se puso en contacto con Tri Star para seguir adelante con un posible acuerdo, aunque la cantidad exacta sigue siendo un punto de fricción.
En julio, un juez dictaminó que Britney no tendría que declarar porque es "poco probable que proporcione información nueva".
La jueza Brenda Penny dijo: "Existen medios alternativos y menos delicados para buscar información".
El abogado de Britney elogió el fallo en su momento al decir: "Estamos muy satisfechos, pero no sorprendidos de que la jueza Penny haya vuelto a confirmar su meditada y jurídicamente correcta sentencia, rechazando una vez más el vergonzoso y desesperado esfuerzo del señor Spears por tomar declaración a su propia hija. Cualquier hombre decente, especialmente un padre, aceptaría sus pérdidas y simplemente seguiría adelante".
Por su parte, el representante legal de Jamie, Alex Weingarten, aseguró: "El Sr. Spears hizo lo correcto por su hija. La tutela era para su beneficio, la verdad saldrá a la luz".
Rosengart había afirmado previamente que el intento de empujar a Britney a una declaración era una "represalia" y un "abuso del proceso legal".
