A la ceremonia de gala, asistieron, además de Carlos de Gales; el exjugador de críquet Garry Sobers y la cantante Rihanna, ambos de Barbados, que fueron recompensados con el premio de Héroes Nacionales.
También destacó la presencia de varios líderes de la Comunidad del Caribe (Caricom), entre cuyos quince estados miembros hay varias antiguas colonias británicas.

Carlos de Gales, quien recibió la Orden Honoraria de la Libertad de Barbados aunque su presencia en los actos fue criticada por algunos, dijo que la creación de esta república marca "un hito en el largo camino" que los barbadenses "han recorrido y construido".
En su discurso, hizo alusión a "las espantosas atrocidades de la esclavitud" durante la época colonial, ya que a Barbados, al igual que a otras islas caribeñas, fueron transportados esclavos procedentes de África para trabajar las plantaciones de azúcar.
Por ello, el príncipe Carlos, futuro líder de la Commonwealth, destacó que la población de la isla "ha forjado su camino con extraordinaria fortaleza, emancipación, autogobierno e independencia" y ahora contempla "un nuevo horizonte".