“Ese día fue el último día que lo vi. Comí con él y lo llevé al ensayo de Thalía. Fuimos a comer ese día, con Gustavo Cerati, ya fui yo y le dije ‘Oye, me tengo que ir al ensayo, al soundcheck de Thalía’, les dije ‘¿Me acompañan?’ sabiendo que me iban a mandar a volar”, expresó Forat, quien se sorprendió por la respuesta del cantante.
“¿Cerati yendo a una cosa de esas? No por minimizar a Thalía, absolutamente todo lo contrario, pero era como 'Seguramente tendrá sus cosas que hacer u otros planes...', pero dijo ‘Feliz, encantado’, dije 'Ok'. Llegamos al ensayo y estaba fascinado, el tipo estaba encantado (diciendo) ‘No lo puedo creer’ y, bueno, Thalía es Thalía. ¿Qué te puedo decir? Es una estrella así que irradia luz y energía positiva a cientos de kilómetros de distancia”, añadió.
El ejecutivo admitió que pudo haber concertado una colaboración entre los dos cantantes, sin embargo, todo se quedó en una idea que hasta la fecha le causa remordimiento.
“Una de las cosas de las que más me arrepiento, mucha gente me pudo haber linchado es que estaba a punto de invitar a Gustavo a que cantara en el Primera fila, me salió natural y pensé ‘¿Y por qué no? Yo sé que esto es aparentemente impensable, si ahorita le digo a Gustavo me va a decir que sí y Thalía me va a decir que sí seguramente’ y me contuve, no me atreví, no supe cómo hacerlo y, bueno, no pasó, hubiera estado muy bien”, relató Paul.