La empresa iHandy afirmaba que no sabían que la mujer que salía en la imagen era Kim Kardashian West.
“El acusado afirma, absurdamente, como su supuesta defensa… que no sabían que la foto sin licencia y no autorizada que robaron y apropiaron indebidamente fue la de [Kim Kardashian West]… una de las más famosas y mujeres reconocibles en el mundo”, dijo el abogado de la socialité.
En la demanda que existe en la Corte Superior de California, Kardashian West pide 10 millones de dólares por utilizar la imagen en 2017.
Esa aplicación ofrece “selfies perfectos con herramientas profesionales de belleza y retoque corporal, que incluyen vida facial, suave, corrector, delgado y más”.
Sweet Camera es el nombre de la app y en la queja se acusa a iHandy de “apropiación indebida flagrante y calculada, uso no autorizado y explotación comercial fraudulenta” de una foto de Kardashian, según informó la revista Forbes.
La app “amenazó” a la estrella de reality show de interponer cargos contra ellos por su flagrante infracción, o la perseguirían”.
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