Exclusiva: “Nunca intentaría ser galán”, asegura Darío Yazbek

“Ni me atrevo a serlo, porque sé que no me va a salir; entonces no más lo manejo así, cuando hay que hacer un chiste, intento ser galán, cuando no hay que ser chistoso, mejor no”, aseguró Darío, mientras se rascaba la pierna que tenía cruzada y ofreció una sonrisa que dejó en claro que es muy modesto.

Yazbek disfrutó de su incursión al universo del doblaje y aceptó que le dio una nueva perspectiva a su carrera, más aún porque en la edición original, en inglés, la voz de Rex es la de Daniel Radcliffe: “Como funciona es muy interesante, porque hay muy poco tiempo para preparar el personaje, eso es una locura; en cine, series o teatro tienes mucho desarrollo previo.

“Lees el guión, ves el material, te involucras y lo vas sacando, en este caso me dijeron: ‘Es un agente secreto y lo que hacía’. Llegué con ideas de lo que me habían dicho y cómo podíamos dar una voz interesante al personaje y lo que salió fue ir descubriéndolo poco a poco, con los clips que veía de Daniel y para la sátira del personaje quisimos que fuera un intento de galán”, abundó.

Crear la personalidad de Dasher a la mexicana fue un proceso muy divertido para Darío: “Era buscar sonar muy seductor, pensaba en esa idea, pero no funcionaba tanto, así que con el director le dimos muchas vueltas para encontrarlo”, explicó, al tiempo que compartió que está “muy agradecido por entrar a un mundo que no conocía, en el que no había trabajado.

“Me ha enseñado mucho, de mí, de mi trabajo, de cosas que me faltan por mejorar y creo que fue una clave muy importante al hacer esto, decir: ‘vamos a hacer el doblaje de cierta forma’, porque en México tenemos el doblaje muy presente y lo conocen en toda Latinoamérica, eso fue aprender de esta industria tan compleja, fue algo muy gratificante en lo personal”, explicó Yazbek.

Juega a conquistar el mundo

El hermano de Gael García se sinceró con este medio y reveló que cuando era chico disfrutaba de pasar horas jugando con Playmobil, y ahora que tiene la oportunidad de ser parte del trabajo que llevó a los muñecos de plástico a la gran pantalla, se siente feliz con el que el mensaje que se transmite que es tan importante.

“La película tiene este mensaje que es muy lindo de romper diferencias, sanar heridas a partir del juego y mientras en la actuación también lo hagas, jugar, salen muchas cosas, porque al final del día actuar es seguir jugando a algo”, comentó Darío, a quien se le cuestionó a qué jugaba con Playmobil y con quién.

“Yo tenía unos Playmobil de piratas de niño, y me fascinaban, hasta la fecha me gustan, me volaba la cabeza con todo lo que hacía, ahora que hice el doblaje he pensado mucho en el tiempo que pasé jugando con mis muñecos, era una cosa muy importante en mi vida, ahora que lo pienso, algo muy presente, estoy seguro que si voy a casa de mi mamá y los busco, ahí estarán”, dijo.

Yazbek compartió cuál era el universo que creaba con sus juguetes: “Jugaba solo, mi hermano (Gael) es mucho más grande, así que ya le importaban otras cosas (risas). Tenía un mapa muy grande y quería conquistar el mundo”, y en ese sentido, con su labor como actor, productor y pronto guionista, a Darío “todavía me falta terreno, ¡sigo jugando a conquistarlo!”, finalizó.