Escrito por el ejecutivo y leído por la monarca en una gran ceremonia, este tradicional discurso es uno de los puntos fuertes del calendario político británico.
Pero la soberana, que cumplirá 96 años en abril, ha reducido considerablemente su agenda en los últimos meses por motivos de salud.
La oficina del primer ministro anunció el jueves que el acto tendrá lugar el 10 de mayo, tras lo cual el Buckingham Palace se limitó a decir que la participación de la reina "se confirmará a su debido tiempo".

Isabel II podría delegar en su hijo Carlos, príncipe de Gales y heredero al trono de 73 años.
En sus 70 años de reinado, la monarca sólo ha faltado dos veces a esta cita: en 1959 y 1963, cuando estaba embarazada de los príncipes Andrés y Eduardo respectivamente.
Pero su frágil salud podría llevarla este año a eludir una ceremonia larga y pesada.