
La princesa Eugenia, la menor de sus dos hijas, viajó ayer hasta la residencia privada de la soberana británica en Escocia con su esposo Jack Brooksbank y su hijo de seis meses, August, para mostrar su apoyo incondicional a su padre.
Toda la familia de Andrés ha estado junto a él desde que salió a la luz por primera vez su conexión con el proxeneta Jeffrey Epstein, que se suicidó en prisión en el verano de 2019 mientras esperaba a ser juzgado por tráfico sexual de menores.