
Los hechos ocurrieron entre 2000 y 2002, cuando la mujer de nacionalidad estadounidense tenía 16 años, y se hicieron a través de la extensa red de tráfico sexual por la que Jeffrey Epstein fue encarcelado. El financiero se suicidó en una prisión de Manhattan en el verano de 2019.
"Hago responsable al príncipe Andrés de lo que me hizo. Los poderosos y los ricos no están exentos de rendir cuentas. Espero que otras víctimas vean que es posible no vivir en el silencio y el miedo", ha dicho Virginia en una declaración difundida a los medios de comunicación este lunes.

“En múltiples ocasiones, el príncipe Andrés tocó intencionalmente (a Virginia) de manera ofensiva y sexual sin su consentimiento... Las acciones del príncipe Andrés, descritas anteriormente, constituyen una conducta extrema e indignante que conmociona la conciencia”, agrega el comunicado.
"No fue una decisión tomada a la ligera. Como madre y esposa viene mi familia primero. Sé que esta acción me someterá a más ataques por parte del príncipe Andrés y sus representantes legales", agregó la denunciante.