A estas "deserciones" se sumó la renuncia de Catherine St-Laurent, su jefa de personal y directora ejecutiva de su organización sin ánimo de lucro Archewell, tras tan sólo 11 meses en el cargo, lo cual se interpretó en su momento como una señal de que la actitud y el comportamiento de la ex actriz no habían sido bien recibidos por el personal de palacio, tal y como aseguraban los rumores.
Sin embargo, Catherine —que ahora es una de las asesoras principales de la fundación— ha querido aclarar que el tiempo que pasó trabajando con la pareja resultó muy satisfactorio a nivel profesional.