Tras unos meses desde la renuncia de Meghan y Harry a la realeza británica, ahora la noticia de que compraron una casa es la prueba de que su asentamiento en Estados Unidos no es temporal y la pareja está pensando en quedarse a vivir ahí, después de pasar unos meses en Canadá.
De acuerdo con información del portal Page Six, la nueva residencia de los duques de Sussex y de su pequeño hijo, Archie, sería una mansión de lujo ubicada en Montecito, a unos 140 kilómetros de Los Ángeles.
Los datos fueron corroborados por un representante de la localidad, para medios estadounidenses; fuente que asegura que desde hace algunas semanas, Meghan y Harry llegaron a la comunidad con la firme intención de permanecer alejados del bullicio y en busca de su anhelada privacidad.
Ahora diversos medios de EEUU, revelaron más detalles sobre el inmueble que se convertirá en el nuevo hogar de los duques de Sussex.
De acuerdo con información de la inmobiliaria encargada de la venta, Keller Williams Montecito , la lujosa residencia tiene una extensión de 18 mil pies (casi seis mil metros), cuenta con nueve dormitorios, 16 baños, piscina, un cine, un completo gimnasio, un spa.
También tiene una biblioteca, una oficina, una enorme bodega, cocina de última generación, sala de juegos y entretenimiento, una cancha de tenis, un garaje para cinco autos y una gran área de juegos infantiles.
Además de tener un acceso controlado, pues se trata de una zona privada, lo que garantiza que Meghan y Harry no tendrán que preocuparse por los paparazzi, y podrán concentrarse en disfrutar de su hogar rodeados de vistas panorámicas del mar y las montañas que rodean su nuevo vecindario.
Entre otros detalles, medios británicos aseguran que la lujosa residencia fue adquirida con la ayuda del príncipe Carlos, sin embargo, New York Post afirma que la pareja compró el inmueble sin ayuda de la familia real.
La espectacular mansión se encuentra rodeada de mucha tranquilidad, pero también de muchas otras celebridades, como Ellen DeGeneres, Oprah Winfrey, George Lucas e incluso se sabe que Gwyneth Paltrow también está construyendo una nueva casa en la zona, lo que habla de la exclusividad del vecindario.
“Esta es la primera casa que cualquiera de ellos ha tenido. Ha sido un momento muy especial para ellos como pareja y como familia: lograr tener total privacidad durante seis semanas desde que se mudaron. Tienen la intención de echar raíces en esta casa y en la tranquila comunidad, que tiene una privacidad considerable. Aquí es donde quieren criar a Archie, donde esperan que pueda tener una vida lo más normal posible”, explicó una fuente a Page Six.
Se ha especulado que la propiedad elegida por Harry y Meghan habría sido una oferta, pues de los 29 millones de dólares en que se vendía, ellos pudieron comprarla en 14.6 millones de dólares.
