Claro que ha habido un cambio de imagen y se nota. Se veía espectacular.
Su llegada bajo la lluvia junto a Harry mientras éste sostenía una sombrilla y se miraban tan enamorados como siempre fue de película sin embargo aunque es evidente que cuidaron cada detalle no pudieron controlar la reacción de algunos ingleses que se agolparon a las afueras del lugar.

Con un “buuu” quisieron arrebatarle la sonrisa a la norteamericana y aunque por segundos se mostró contrariada, rápidamente recuperó el tipo. Al darse cuenta de lo ocurrido los pocos fans congregados a las afueras del lugar les gritaron su nombre pero sí, definitivamente no fue un recibimiento tan cordial y sobre todo tan efusivo como cuando la pareja se comprometió en donde parecían estrellas de cine. Ni si quiera hubo aplausos así de frío fue ayer. El Megxit pasó factura con su público inglés y eso se nota.