Aunque pareciera que
, antes de su llegada a la familia real llevaba una vida como cualquier otro joven de su edad. Prueba de ello, es el trabajo que tenía cuando estudiaba la universidad.
En el programa navideño 'A Berry Royal Chrismas' de la BBC , la duquesa de Cambridge y la presentadora y cocinera Mary Berry prepararon cocteles sin alcohol y fue justo en ese momento cuando la futura princesa de Gales recordó su trabajo de universidad.
“Esto me recuerda cuando trabajé de mesera en mis años de universidad”, dijo.
Barry le preguntó si la trataban bien y de manera inesperada Kate respondió: “No, ¡era malísima!”. Al parecer, Kate tampoco es muy buena en la cocina, pues también recordó una desastrosa anécdota: “Una vez hice sopa de espinaca y me olvidé de ponerle la tapa. Así que la sopa acabó en el techo".
A pesar de esa experiencia, la duquesa prepara la comida en el palacio de Kensington regularmente. De hecho, sus hijos George y Charlotte suelen ayudarle. “Louis adora el betabel. Y obviamente, a Charlotte le gustan las papas Charlotte”, contó.
Aunque Kate no es la mejor cocinera, su esposo, el príncipe William, sí tenía potencial para ser un gran cocinero, ya que aprendió a cocinar en el colegio Eton y, en la universidad, preparaba boloñesa para consentir a Kate. No obstante, en el mismo programa él mismo aseguró que ahora sus habilidades no superan las de preparar una taza de café.