Meghan inició el proceso para conseguir la ciudadanía hace dos años, después de que se anunciara su compromiso con el nieto de la reina Isabel II en noviembre de 2017, pero el Palacio de Kensington dejó claro que Meghan sería tratada como a cualquier otra persona y que cumpliría con los requisitos que estipula el Gobierno en materia de inmigración.

En Reino Unido hay varias opciones para conseguir ser ciudadano, aunque todo indica que Markle se postuló por la opción de pedirla como cónyuge de un británico. Para este supuesto, la ley establece que hay que cumplir tres años de matrimonio antes de obtener la nacionalidad, algo que no le molesta a la royal, según uno de sus amigos.
Puede parecer extraordinario dado que ha estado casada con el nieto de la reina durante 18 meses, pero acepta el procedimiento tal y como es