Paris Hilton sigue hundida en la tristeza tras la desaparición, hace ya tres meses, de su perrita Diamond Baby.
Pese a contratar a un detective privado, e incluso recurrir a un vidente especializado en animales domésticos, para tratar de averiguar el paradero de su mascota, todos sus intentos han sido inútiles hasta la fecha y sus esperanzas no dejan de apagarse con el paso de los días.