Ella fue Marguerite Littman
La Holly Golightly de carne y hueso nació en Monroe, Louisiana, como parte de una de las familias de mayor tradición de la ciudad, pero pronto el sitio le quedó pequeño a Marguerite, quien se describía a sí misma como una "socialite en zigzag", que poco a poco alcanzó a subir los peldaños que la llevaron a lo más alto del jet set internacional.
Basta ver a quienes fueron su círculo más cercano: Elizabeth Taylor, Bianca Jagger, Andy Warhol, Rock Hudson y Truman Capote, quien le rindió un homenaje a través de su personaje protagónico en Breakfast At Tiffany's, Holly Golightly, a la que dotó de las principales características que vio en su amiga; pequeña, vivaz y encantadora.

Littman nunca dejó atrás su acento sureño en su camino a encumbrarse en lo más alto de la sociedad, al contrario lo perfeccionó de tal forma que incluso Taylor fue su "mejor alumna" cuando intentó replicarlo para su rol de Maggie en una cinta que es parte de su legado actoral, Cat on a Hot Tin Roof.
A otra figura que conoció y con la que logró entablar una amistad fue nada menos que la princesa Diana de Gales, a ellas las unió su alto sentido de la filantropía e intercambiaban notas respecto a cuál de las dos lograba "llenar con más oxigeno a una habitación cuando entraba".
Sus amores
Para Marguerite la vida pasó entre su país natal, EE.UU., y su ciudad favorita de Europa, Londres, donde vivió durante 30 años, al lado de su tercer marido, Mark Littman. El patrimonio de la pareja incluía una casa en Brompton Square y luego una mansión en Chester Square, sede de sus eventos altruistas, al estilo sureño estadounidense.