Desde marzo, una vez que Jacky Bracamontes confirmó que afortunadamente ni su esposo (el piloto Martín Fuentes) ni su hija Renata tenían coronavirus, toda la familia ha vivido la cuarentena en su casa de Miami.
Es un lugar súper amplio y que justo tiene lo necesario para que la familia dé rienda suelta a su gran pasión por los deportes acuáticos.
Se trata de una propiedad que está frente al mar donde seguramente, los amaneceres y las puestas de sol deben verse espectaculares desde la terraza que tienen en la recámara principal, o bien, desde su gran jardín en el que también hay una alberca y un brincolín para pasar momentos muy divertidos.
Pero justo lo más interesante de ese jardín es que está conectado a un pequeño muelle que es la puerta de acceso al paraíso: los deportes acuáticos. Ahí tienen jetskis y algunas tablas de kayac sobre los Fuentes-Bracamontes pasan prácticamente todos los días si es que el clima así se los permiten.
De hecho, Martín y Jacky ha compartido varios videos que hacen evidente que en estos meses de encierro sus hijas mayores son niñas de acción y ya son unas expertas en varios deportes acuáticos.
Por ejemplo, Jacky, la mayor, ya está aprendiendo a conducir la lancha con el que muy pronto llevará a su papá a esquiar a toda velocidad. Renata podrá tener tres años, pero ya esquía como toda una profesional. Y Caro ya domina el jetsurf (es decir, la tabla de surf motorizada).
Esto del vaivén de las olas aún hace que las gemelas Paula y Emilia se queden dormidas, pero seguramente en un par de años darán la competencia a sus hermanas en esto de los deportes acuáticos.
