Horas después de la cirugía el músico se reportó como "estable" y, según su amigo Benjamín Prado, "ya se encuentra mucho mejor". "Lo primero que ha hecho tras la operación ha sido pedir un cigarro, nos dijo 'denme un cigarro'", comentó.
Fue su mismo amigo quien explicó que Joaquín Sabina estaba más interesado en continuar con el show que ofrecía que de ser revisado de la lesión que se acababa de ocasionar, tras la caída, sin embargo, los médicos del recinto fueron quienes frenaron el deseo del cantante y sugirieron una revisión más profunda.
“Joaquín quería seguir el concierto. Fueron los médicos los que le dijeron que no, porque estaba en un estado de euforia propia de quien está ante 15 mil personas actuando", añadió Benjamín Prado.
El intérprete de '19 Días y 500 Noches' cumplió el miércoles 71 años. Un cumpleaños que terminó con el artista con un "traumatismo de hombro izquierdo, torácico y cranoencefálico".