Inés hace fuertes confesiones sobre ausencia de su ex en nacimiento de triates

Inés Gómez Mont abrió su corazón para contar a la periodista Mara Patricia Castañeda los momentos más difíciles que enfrentó antes, durante y después del nacimiento de sus triates, Diego, Javi y Bruno, durante los cuales no estuvo presente su ex esposo, Javier Díaz.

Hace siete años los pequeños llegaron al mundo, pero desde antes de su nacimiento el panorama no era el más prometedor. “Todo el embarazo de los triates fue súper desgastante porque fue de alto riesgo”, dijo Inés cuando empezó a tocar el tema. “Tuve ocho amenazas de aborto, los doctores hablaron conmigo para decirme que no iban a sobrevivir. De hecho, en la semana 16 del embarazo me pidieron absorber un bebé para que tuvieran más probabilidad de vivir dos”, añadió.

La conductor a contó que siempre se negó a perder a alguno de sus hijos, pues estaba dispuesta a morir con ellos y así vivió seis meses, en reposo absoluto.

Desde entonces, la relación con Javier Díaz ya se había roto un poco. “Yo creo que éramos más roomates que realmente matrimonio”.

La relación se desgastó con su parto prematuro (a la semana 32). Inés pudo conocer a sus hijos 48 horas después de su nacimiento: “Le daban sobre todo a Diego muy pocas probabilidades de vida. Los tres estaban en terapia intensiva y era muy fuerte. Fue una etapa que la pasé muy sola. El papá de mis hijos no los iba a ver porque decía que había tráfico. No me sentí ni acompañada".

Inés ganó una batalla a la vida cuando le permitieron llevarse a los niños con ella, pero justo el día que salió del hospital, su marido le avisó que ya no quería seguir con la relación: “Salen mis hijos del hospital y es cuando me dice ‘Ya no te amo, no te deseo. Ya no me gustas, tu cesárea está asquerosa y me voy’. Y es cuando él se va por los cigarros, ya no regresó. Y es enfrentarme a esa realidad, con cuatro niños, tres con monitores, oxígenos en mi casa, y sola. Si no hubiera contado con el apoyo de mis papás, yo creo que no sé qué hubiera sido de mí”.

“Enfrento esta realidad de madre soltera, donde salía a trabajar todo el día, donde lo único que me preocupaba era pensar cuánto me alcanzaba para las vacunas, las inyecciones, las terapias de mis hijos, el seguro de gastos médicos y hacía cuentas de cuánto costaba la colegiatura”.

Desde ese momento, los niños (incluida Inesita) han tenido poco contacto con Javier y ha sido justo la niña la que más ha resentido la ausencia de su papá. Sin embargo, Víctor Manuel Álvarez Puga, actual pareja de Inés, se convirtió en la figura paterna de todos ellos.