El príncipe Harry vuelve al ojo público. Este martes se presentó en el Tribunal Superior de Londres para testificar contra el grupo editorial MGN , propietario de varios tabloides británicos, para defender a su familia del acoso mediático del que es objeto desde que inició su relación con Meghan Markle.
Harry critica que lo catalogaran como 'el príncipe fracasado y tonto'
Harry testificó este martes contra el grupo MGN para explicar cómo le afectaron las historias que solían publicarse acerca suyo en los tabloides; de paso criticó al gobierno británico
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Entre sus declaraciones llamó la atención una en especial: habló de sus años de juventud en los que fue calificado por la opinión pública como el miembro rebelde de la familia real, para explicar cómo le afectaba leer acerca de sus fracasos y vicios -sin importar que fueran reales o inventados- en la prensa.
El príncipe Harry señala que los medios siempre lo catalogaron como el príncipe tonto y fracasado
El esposo de Meghan Markle argumentó en la audiencia que la imagen pública que se construyó a su alrededor y lo catalogó como "el príncipe playboy" o "el fracasado que abandona los estudios" acabó definiendo su propio compartimiento en la vida real.
Además hizo énfasis en los adjetivos con los que la prensa se referería a él y que quedaron grabados en su mente y lo perjudicaron emocionalmente, entre ellos tonto, tramposo, alcohólico y drogadicto irresponsable.
"Cuando era adolescente y tenía poco más de veinte años, acabé sintiendo que estaba haciendo honor a muchos de esos titulares y a los estereotipos que querían colocar sobre mí, principalmente porque pensaba que si estaban publicando esa basura sobre mí y la gente se lo creía, por qué no iba a vivir acorde a esa reputación, por así decirlo", dijo.
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El duque de Sussex confesó que los tabloides trataban de presionarlo o provocarlo para que hiciera "algo estúpido" que diera pie a una buena historia y ayudara a vender periódicos.
Harry critica al gobierno británico
Sin embargo, sus señalamientos no terminaron allí, Harry también criticó a la prensa por no juzgar al gobierno británico y, según sus palabras, solaparlo. Con esto, el duque de Sussex rompió la norma de oro de la monarquía, que jamás se pronunciaba acerca de la política mientras su abuela Isabel II aún ocupaba el trono.
"Nuestro país es juzgado en todo el mundo por el estado de nuestra prensa y nuestro gobierno, y creo que ambos están tocando fondo. La democracia fracasa cuando la prensa no escruta al gobierno ni le exige responsabilidades, y en su lugar opta por colaborar con él para garantizar el statu quo", declaró Harry.
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