Aunque hace tres décadas
, creadores del famoso vestido de novia de la princesa Diana, se divorciaron y rompieron con su relación profesional, actualmente protagonizan una nueva batalla legal y está relacionada con la princesa de Gales.
El diario británico Daily Mail publicó que David demandó a su ex esposa por haber subastado unos bocetos del vestido de novia de Diana, así como otros diseños que realizaron para la ex esposa del príncipe Carlos. Entre ellos se encuentra el vestido de tafetán que Lady Di usó en su primer acto público con el heredero al trono, así como el que eligió para el estreno de la película Memorias de África en 1986.
La demanda del diseñador de 68 años es porque la subasta se realizó sin su consentimiento, lo que significaría una infracción al acuerdo al que llegó la ex pareja tras su divorcio que, por cierto, ocurrió un par de años después de que Diana y Carlos anunciaran su separación. El diario antes mencionado, indicó que el ex matrimonio pactó que ninguno podría usar la marca Emanuel para sus negocios personales.
David solicitó que se reconozca que comparte con su ex esposa el copyright de los bocetos y, por tanto, tiene derecho a obtener una parte de las ganancias que Elisabeth haya conseguido con la subasta, que incluyó la blusa de gasa blanca con cuello volante y un lazo en color rosa que Diana usó para el retrato oficial de su compromiso para la revista Vogue.
De hecho, esa blusa fue la que animó a la joven Lady Di a llamarlos para que hicieran su vestido de novia. Este encargo lanzó a la fama al matrimonio, pero también los condenó: “Quien diseñe el vestido de Kate quedará inundado de ofertas, pero es un arma de doble filo. La gente te asocia ya solo a eso y tienes que insistir en que haces algo más que vestido de novia”, dijo Elisabeth en 2011 previo a la boda de los duques de Cambridge.
Los diseñadores no supieron manejar bien su éxito una vez pasada la euforia por el vestido de novia de Diana de Gales: tanto su negocio como su matrimonio fracasaron.
Luego de firmar el divorcio,
con su nombre, pero solo unos meses después el negocio se vio en problemas y, más tarde, la marca fue vendida a otra compañía. Así que la diseñadora tuvo que enfocarse en encargos individuales, como el vestido de novia que usó Elizabeth Hurley en 1997 en el anuncio del perfume Estée Lauder. En 2007 creó la nueva firma Art of Being, pero no ha vuelto a ver el mismo éxito que tuvo en 1981.David también continuó su carrera en el mundo de la moda y en años recientes creció su popularidad gracias a su faceta como anfitrión del programa de televisión sobre vestidos de novia Say yes To The Dress. También participó en el reality de supervivencia I’m a Celebrity…Get Me Out Of Here!, donde nació otra disputa entre los ex esposos, ya que en la emisión el diseñador aseguró que había sido él quien había atendido la famosa llamada de Diana, pero Elisabeth lo desmintió y aclaró que había sido ella.