Aunque en estos momentos
su popularidad mediática en Estados Unidos, donde residen desde marzo junto a Archie Harrison, lo cierto es que el príncipe Harry, y quizá en menor medida Meghan Markle, estarían deseando volver al Reino Unido para ponerse al día con el resto de los miembros de la familia real y satisfacer otros compromisos ligados a su labor solidaria.
Según la revista
, la pareja podría volver al Reino Unido a fines de año e incluso pasar allí las fiestas navideñas, llenas de eventos familiares y demás tradiciones muy propias de la dinastía Windsor. Sin embargo, sus supuestos planes dependerán, evidentemente, de la situación que presente la actual crisis sanitaria del coronavirus, algo que el propio príncipe ya habría comunicado a las diferentes fundaciones de las que ejerce como patrón o presidente honorífico.De momento, la pareja real está muy centrada tanto en la apacible vida familiar que ha podido construir finalmente en Santa Bárbara, California, donde compraron recientemente su primera propiedad en tierras americanas, así como en las tareas que les ha traido el contrato que firmaron con Netflix y que los convertirá en productores ejecutivos de buena parte de sus próximos programas.
De la misma forma,
dentro de lo que les permite su posición de neutralidad política, en la campaña electoral que desembocará en la elección de un nuevo presidente o en la ampliación del mandato de Donald Trump, el próximo 3 de noviembre. Esta misma semana, la royal couple intervino en un programa especial de televisión para invitar a los ciudadanos a ejercer su derecho al voto.Ante la iniciativa de los duques de Sussex, el presidente Trump ya les respondió y ante varios periodistas dijo: "No soy un fan de ella [Meghan]. Le deseo buena suerte a Harry, porque la va a necesitar".
Cabe mencionar que el príncipe Harry también está muy entusiasmado con la iniciativa de su esposa, e incluso, reveló públicamente que en su condición de royal nunca pudo ejercer su derecho al voto debido a que la monarquía británica y el parlamento deben trabajar en conjunto sin importar el partido político que quede a cargo de la nación.
Y es que es un hecho que la familia real británica, incluida
sus opiniones sobre política.Ante esta situación, el Palacio de Buckingham también ya expresó su postura y se deslindó totalmente de los comentarios de Harry, puesto que desde el 30 de marzo ya no es un miembro activo de la familia real.
"No haremos comentarios. El duque no es un miembro activo de la familia real y cualquier comentario que haga se hace a título personal”, se lee en la postura oficial.