Ahora que poco a poco las cosas han vuelto a la normalidad, tras la crisis sanitaria por el
, la princesa Charlène, , aprovecha estos días para retomar un antiguo pasatiempo que le da publicidad a sus esfuerzos de caridad en la Princess Charlene of Monaco foundation.
De acuerdo con la revista People, durante las últimas dos semanas Charlène se ha dejado ver en Calvi, en la isla cercana de Córcega, entrenando en su bicicleta acuática. Este martes, reveló que no sólo está entrenando, sino que también participará en la próxima carrera de resistencia en el Mediterráneo, que se llevará a cabo el 12 y 13 de septiembre.
Charlène
hace cinco años y de inmediato comenzó con el acondicionamiento extremo. No practica en cualquier bicicleta, sino en una Schilller SC-1 de última generación y fabricación estadounidense.Pero, ¿de qué va este reto extremo? La carrera será con dos equipos que saldrán al medio día, el 12 de septiembre, de Córcega. En el trayecto habrá cuatro relevos con la intención de que la carrera dure 24 horas y la meta será en el Yacht Club de Mónaco. Charlène, además de ser la organizadora del evento, también es la defensora de su equipo.
La princesa denomina esta carrera como "una increíble aventura humana" y espera que esto promueva la conciencia sobre la seguridad del agua y fomente la comprensión del apego común al Mediterráneo.
La fue Princess Charlene of Monaco foundation fue creada en 2012, su objetivo principal era la enseñanza de natación y la seguridad en el agua. Actualmente, la organización apoya activamente la instrucción de natación, además de programas deportivos y educativos en 34 países.
Córcega es uno de los destinos favoritos de los príncipes de Mónaco y de
, ya que en varias ocasiones han estado allí de vacaciones. De hecho, hace dos semanas Alberto y Charlène celebraron su noveno aniversario de bodas junto a sus mellizos de cinco años.