Esta semana se dio a conocer que Joaquín de Bélgica había burlado las recomendaciones de distancia social y había asistido a una fiesta con otras 26 personas, donde, aparentemente, se había contagiado de coronavirus. Ahora, después de una investigación, se dio a conocer el informe policial y las conclusiones a las que se llegaron.
La Polícia Nacional concluyó, según un informe al que ha tenido acceso ABC, que no hubo una fiesta con tanta gente, sino dos eventos distintos.
Mariano Aguayo Fernández, abogado de Joaquín, aseguró al portal español Vanitatis que el royal convivió con 26 personas en el total de días que estuvo en España y no en un evento como se dijo. Tras la investigación, la Policía Nacional indicó que efectivamente las cosas ocurrieron así: nunca existió una fiesta con tantos asistentes.
Joaquín viajó a España el domingo 24 de mayo con la intención de sorprender a su novia, la cordobesa Victoria Ortiz, quien al día siguiente celebraría su cumpleaños 30. Hasta ahora, no se sabe cómo consiguió un vuelo, pero todo parece indicar que echó mano de su pasaporte diplomático.
Al día siguiente, para celebrar el cumpleaños de Victoria, se organizó una cena en la finca familiar de su novia, ubicada en Honachuelos, a la que asistieron sólo 12 personas, según la policía. El martes 26 tuvieron otra reunión, pero en esa ocasión fue en la casa del Brillante de los Ortiz Martínez-Sagrera, a la que fueron 15 personas, según datos obtenidos por el cuerpo nacional
Estas revelaciones dejan al descubierto que en ningún momento se violaron las recomendaciones de la fase 2 del país, mismas que especifican que no se pueden congregar más de 15 personas.
Sin embargo, el royal sí violó otra medida del contención de la pandemia. El Ministerio de Exteriores determinó que a partir del 15 de mayo las personas procedentes del extranjero debían guardar cuarentena los próximos 14 días después a su llegada, medida que el príncipe Joaquín de Bélgica no acató y podría generarle una sanción económica.
