Aunque
tienen poco más de un mes viviendo en Los Ángeles, la exactriz no había tenido la oportunidad de reunirse con su mamá porque llegaron a la ciudad cuando ya se habían implementando alas medidas de distanciamiento social para evitar la propagación del coronavirus. Aunque las restricciones continúan, se dio a conocer que el reencuentro entre mamá e hija ya ocurrió y fue precisamente el Día de las madres.
De acuerdo con el portal OprahMag.com, de Oprah Winfrey, la duquesa de Sussex y su mamá se volvieron a ver en persona el domingo pasado. Tras darse a conocer esta información, la gran duda era saber si la familia había roto la cuarentena, pero no fue así. Todo indica que fue una reunión segura y aplicando el distanciamiento social.
Uno de los principales motivos de la duquesa para mudarse a Los Ángeles era precisamente poder estar cerca de la instructora de yoga, quien siempre ha estado cerca de Meghan en los momentos más importantes, como su boda o el nacimiento de su hijo, Archie Harrison.
No obstante, las cosas no salieron como las planeó la pareja, pues tuvieron que esperar algunas semanas para por fin reunirse con Doria, quien tampoco pudo asistir al primer cumpleaños de su nieto.
Medios como el portal Express aseguran que el interés de la duquesa en ser parte de organizaciones benéficas nació de lo valores de retribución y bondad que le inculcó su mamá. De hecho, hace unas semanas, la pareja entregó comidas a personas vulnerables en nombre de Project Angel Food.
“Meghan no tenía mucho cuando era niña, pero su madre se aseguró de que siempre devolvieran un poco de lo que tenían", aseguró al respecto una fuente a la revista People.