Look y cuerpazo, Meghan Markle regresa a Londres para romperla

La duquesa de Sussex hizo un 'statment' a través del estilismo que utilizó en los Endeavour Fund Awards.
'Love Is in The Air', la imagen de Meghan y Harry dice más que mil palabras.

"¡Gracias Canadá!", es la frase que seguramente Meghan Markle pronunció al verse al espejo antes de ir a uno de sus últimos compromisos como royal.

y su lenguaje corporal también dijo mucho de lo cómoda que está con su regreso a Londres, después de pasar tiempo en la isla de Vancouver.

Sencillamente la rompió en los Endeavour Fund Awards, su actitud y también la del príncipe Harry es la de una mujer y un hombre enamorados.

que él tomó la decisión de dejar la realeza, no se equivocó. Las muestras de cariño que se hacen Markle y su esposo, las miradas que se dirigen... todo muestra su cercanía.

La canción Vestida para matar describe perfecto el mood que Meghan mostró en la nación que no terminó de aceptarla nunca. Para sentirse segura eligió un diseño de Victoria Beckham, el tercero que muestra en público, con el que se alejó de sus reinterpretaciones de looks masculinos para esta reunión con elementos de las Fuerzas Armadas.

La duquesa de Sussex acertó en el uso de sus accesorios.

Su apuesta: un vestido (£980) crepe midi en clave working azul celeste, manga corta, cuello tipo caja, cintura ceñida, falda tipo tubo que terminaba debajo de sus rodillas y cremallera posterior. Este modelo fue bautizado como el T-shirt fitted dress —por su inspiración en una sencilla camiseta—. En los accesorios también acertó con sus stilettos de gamuza azul marino Jimmy Choo (£495).

Completó el look con un clutch azul marble-effect (£655) de la diseñadora Stella McCartney; para que su pelo fuera igual de elegante optó por una pony tale baja, sujeta con gold hoops. Para su rostro utilizó un lipstick que desafió el protocolo, en tono berry, que combinó perfecto con sus smokey eyes en marrón, con un toque de delineador líquido.

En esta oportunidad Markle decidió darle el sí a una confección de Victoria, de quien es fan por su visión creativa, pero que en una entrevista reveló que no creía que alguna de sus prendas la pudieran favorecer. Con esta renovada self confidence demostró lo contrario, se ve radiante y con cuerpazo.

La duquesa de Sussex se veía espectacular y segura de sí misma.

El efecto Meghan sigue intacto a pesar de su salida de la Casa de Windsor, el vestido disponible online está casi agotado. El shining de Markle llega no sólo por su estilo, sino por el amor de Harry, quien en todo momento le prodiga caricias que ella responde sin reparos. La libertad de los Sussex le ha sentado muy bien a la exactriz y también, porque se ve feliz, al hijo menor de Diana.