La prolongada batalla legal entre Brad Pitt y Angelina Jolie ya suma un nuevo capítulo que va más allá de su divorcio y la custodia de sus seis hijos: una demanda por millones de dólares relacionada con su inversión en la finca y viñedo francés Château Miraval, que ambos compraron en 2008.
Brad Pitt exige millonaria cantidad a Angelina Jolie en nueva batalla por el viñedo en Francia
Brad Pitt exige millonaria cantidad a Angelina Jolie en nueva batalla por el viñedo en Francia
En un nuevo giro dentro de la prolongada disputa legal entre Brad Pitt y Angelina Jolie, documentos judiciales revelan que el actor ha solicitado formalmente daños por US $35 millones tras acusar a Jolie de vender sin su consentimiento su participación en el viñedo francés Château Miraval.
Parte del litigio gira en torno a un acuerdo que ambos habrían pactado, en el cual ninguno podría vender su parte sin la aprobación del otro.
Según los documentos judiciales, Pitt afirma que Jolie vendió su participación en el negocio sin ofrecerle el derecho de negociar que él asegura existía, lo que, a su juicio, constituye un incumplimiento del acuerdo original entre ambos.
La demanda de Pitt sostiene que él invirtió una parte del capital y esfuerzo necesario para posicionar el vino Miraval, y que la venta ejecutada por Jolie lo dejó en desventaja financiera. Según los documentos, el actor exige que esa transacción sea declarada nula o que se le compense por la pérdida sufrida, calculada inicialmente en 35 millones de dólares.
Por su parte, Angelina Jolie ha presentado una contrademanda multimillonaria que reclama hasta 250 millones, acusando a Pitt de “acciones ilegales y maliciosas”.Brad Pitt exige millonaria cantidad a Angelina Jolie en nueva batalla por el viñedo en Francia
La contrademanda de Angelina Jolie
Por su parte, Angelina redirigió el conflicto al presentar una contrademanda en la que le reclama a Pitt 250 millones de dólares por lo que ella califica como “acciones ilegales y maliciosas” para apropiarse del negocio que compartían.
Cita, además, que Pitt le exigió firmar un acuerdo de confidencialidad (NDA) como condición para comprar su participación, lo que habría tenido como fin silenciar acusaciones de abuso presentadas en el pasado.
La batalla legal, además de financiera, tiene un fuerte componente simbólico y emocional: la finca que fue centro de su vida juntos ahora representa una contienda más profunda que va más allá del dinero.
El caso, que continúa activo ante tribunales estadounidenses y europeos, mantiene a la industria del entretenimiento expectante: más allá de los nombres involucrados, esta disputa abre interrogantes sobre derechos de propiedad, acuerdos tácitos entre celebridades y la manera en que los negocios compartidos pueden convertirse en armas tras una separación.