Los dueños de los palcos y plateas del Estadio Azteca conservarán el control y uso de sus espacios durante los partidos del Mundial de 2026. A falta del anuncio oficial, la administración del estadio ya comunicó a los titulares que “se respetarán” sus lugares tras una negociación con FIFA, de acuerdo con declaraciones del representante de los propietarios, Roberto Ruano.
Dueños de palcos del Estadios Azteca podrán usarlos durante el Mundial de Futbol

“Nos dijo que no nos preocupáramos… que ya habían negociado con FIFA y nos iban a respetar nuestros lugares”, afirmó Ruano, quien funge como vicepresidente de la Asociación de Palcos y Plateas. En paralelo, directivos del inmueble anticiparon que el acuerdo se formalizará en breve.

Dueños de palcos y plateas del Estadios Azteca podrán usar los espacios durante el Mundial de Futbol
De acuerdo con la información publicada por medios especializados, el esquema acordado para que los dueños de palcos puedan usarlos contempla que el propio estadio absorba el costo que FIFA exige por esos espacios para que no salgan a la venta dentro del programa de Hospitality durante la Copa del Mundo. Es decir, los titulares podrán ocuparlos como lo marca su título de propiedad.
Y es que desde 2024, los titulares de los palcos y plateas emprendieron una disputa legal para defender sus derechos de uso, después de que se advirtiera que durante el Mundial podrían quedar excluidos del inmueble.

Como en cada Copa del Mundo, la FIFA asume el control de los estadios sede, lo que en este caso ponía en riesgo que los propietarios de estos espacios en el Estadio Azteca perdieran el acceso a los mismos durante los cinco partidos que se disputarán en el Coloso de Santa Úrsula.
¿Quién tiene derecho de uso de los palcos del Estadio Azteca?
Tras audiencias de conciliación en la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), las partes programaron una cita clave para el 9 de septiembre, fecha en la que —según el abogado de los palcohabientes, Ángel Diego Vázquez— el estadio se comprometió a presentar una solución definitiva que garantice el acceso de todos los propietarios a los cinco juegos del Mundial en el Azteca.
En esa mesa, representantes del inmueble reconocieron que habían “entregado a FIFA todos los palcos” sin aval de los titulares, lo que detonó la presión pública y regulatoria.
Los palcos del Azteca se vendieron en los años sesenta para financiar la construcción del estadio, con títulos que otorgan uso por 99 años para cualquier evento, incluidos los Mundiales de 1970 y 1986.

Ese modelo chocó con la política de FIFA, que exige control total de los estadios 30 días antes del primer partido y hasta siete días después del último. “Ya pagamos el derecho a estar ahí”, resumió Roberto Ruano, recordando el precedente de 1986, cuando también se permitió la entrada de los propietarios.