Una de las reacciones más esperadas a tan triste noticia, la de Sophia Loren tardó algo más de lo previsto en llevarse a cabo. Sin embargo, la intérprete de 88 años firmó una carta de despedida breves y emotivas.
En ella, la estrella subraya el amor y la admiración que sentía por su compatriota, más allá de la rivalidad que les fue atribuida como si ambas tuvieran que luchar por el mismo nicho de mercado solo por su condición de atractivas y carismáticas mujeres mediterráneas.

"Ayer estaba demasiado rota de dolor y no podía encontrar las palabras adecuadas. Querida Gina, tu cuerpo se ha extinguido pero la luz de tu estrella seguirá brillando sobre nosotros y en nuestros corazones, para siempre. ¡Te quiero, Gina!", dice la nota que reproduce la agencia de noticias Adnkronos.
Años atrás, Sophia aseguraba que ese choque, estrictamente profesional, entre las dos actrices más famosas y mediáticas de su país en el siglo XX respondía en parte a una estrategia promocional del equipo de publicistas de Gina. En esa época, Sophia dejó entrever que ambas competían en categorías muy diferentes de la escena cinematográfica, estableciendo comparaciones que, ciertamente, no dejaban precisamente en un buen lugar a su amiga.