En su setlist siguieron 743, Que no pare, Casi feliz, Lo que siento por ti, en la que provocaron la euforia con una coqueta coreografía; continuaron con El arte de recuperarte y Dice lo que siente. Las palabras sobraban porque el lenguaje más universal unió al grupo y a sus seguidores, más aún cuando desplegaron la insignia LGBTQI+, la bandera arcoíris.
Otro momento mágico fue cuando Ale recibió desde el público un bandera mexicana, que también ondeó con orgullo; entonces sonó un tema de su más reciente placa, que rápidamente se ha posicionado en el gusto de todos sus fans, Extraño. Llegó una de sus canciones más populares, que en su momento compartieron con Julieta Venegas, Perfecta.

Como una de las bandas que rompieron estereotipos, sin miedos, con la constante y protagónica presencia de la bandera multicolor, el mensaje fue claro y sin atajos: los derechos igualitarios se exigieron a través de ese idioma que no tiene barreras ni fronteras, el sonoro, con Puro talento y Ritmo y decepción.
Nada como escuchar a Ale y a Juliana con ese estilo tan particular en el Día de la Marcha del Orgullo. Por la entrega de los mexicanos, Sergi sólo atinó en decir: "Gracias. ¿Cómo están? ¡Qué gusto verte, muchas gracias!", y sin más siguieron con Tu misterioso alguien. Algo muy nice fue que en el escenario tenían prendas colgadas que tomaban según el feeling que tenían.