Su hermana, la princesa Isabella tampoco se unirá al centro educativo en los próximos meses, tal y como estaba previsto inicialmente, debido a las graves acusaciones de abusos sexuales y bullying que se han hecho contra la institución a través de un documental.

Los futuros reyes se tomaron muy en serio los testimonios de dos antiguos alumnos que afirman haber sido víctimas de agresiones sexuales y castigos corporales durante su etapa de formación. Otros cuatro estudiantes fueron expulsados en su momento por participar en dichos abusos y grabarlos en video.
El director del colegio aseguró que se trataba de casos antiguos en respuesta a la indignación generalizada que provocó el documental, y añadió que habían ocurrido cuando la filosofía del establecimiento era muy diferente a la tolerancia cero que muestran ahora ante estas situaciones. Sin embargo, poco después renunció a su cargo.
Federico y Mary, futuros reyes de Dinamarca, reaccionaron a esa información expresando su preocupación por el bienestar de todos los jóvenes al cargo de la institución, añadiendo que como padres esperaban que el personal docente garantizara su seguridad.