Entre sus compromisos estuvo una visita a Cardiff, Gales, donde convivieron con algunos de los cientos que se presentaron a recibirlos durante la visita.
El príncipe y la duquesa de Cambridge estuvieron acompañados por sus dos hijos mayores, los príncipes George, de casi 9 años, y Charlotte, de 7.

Cuando se acercaron a saludar a los asistentes, uno de ellos dijo a Kate que algún día sería una gran princesa de Gales, a lo que la duquesa respondió, “Muy amable de tu parte. Estoy en buenas manos”, señalando con la cabeza a su esposo.
Y es que, aunque actualmente William y Kate ostentan el título de duques de Cambridge, una vez que la línea de sucesión se mueva y el príncipe Carlos se convierta en rey, la pareja se convertirá inmediatamente en duques de Cornwall y príncipes de Gales, título que lleva el heredero al trono británico.