Entre cerveza y música: Carlos, futuro rey de UK, se libera de su seriedad

Escucharon a un grupo de música tradicional y, una vez terminada la demostración, fueron invitados por los músicos a tocar el bodhrán, un tambor de origen irlandés. “¡Mis nuevos estudiantes!”, dijo el artista que les dio la lección.

Más adelante, el príncipe Carlos aprendió a servir la clásica cerveza irlandesa Guinness, conocida por su espesa consistencia y cremosa espuma. Una experta le explicó cómo debía inclinar el vaso para lograr el servicio perfecto, aunque no fue sencillo lograrlo. “Es una experiencia inquietante”, dijo a los presentes.

Cuando llegó el momento de probarla, el futuro rey se ensució la punta de la nariz, algo que su esposa notó y discretamente le indicó. Carlos no tuvo más opción que reírse del incidente y limpiarse de inmediato, ante una sonriente Camila.

Además, tomaron una clase de canto y una de tejido, las cuales forman parte del programa del centro cultural ubicado al oeste de Londres. Pudieron observar una demostración de baile tradicional y finalmente, develaron una placa conmemorativa.

La agenda de Carlos y Camila esta semana ha sido de lo más activa. Apenas ayer acudieron al servicio en honor al día del Commonwealth en la abadía de Westminster, evento del que la reina estuvo ausente. La monarca encomendó a su hijo que la supliera en uno de los días más relevantes de la agenda real anual, en el que el príncipe pudo “echar un vistazo” a cómo serán sus días cuando finalmente llegue al trono.