La maldición que le echaron a la familia Grimaldi y los efectos que ha causado

Hace más de 500 años, una mujer lanzó un maleficio a la familia real de Mónaco y al parecer se está cumpliendo.
Estefanía de Mónaco, el príncipe Alberto, Charlène y Carolina de Mónaco.

Todo comenzó con

, específicamente en el reinado de Rainiero I, quien por su posición abusaba sexualmente de las mujeres hasta que una de ellas le lanzó una maldición: "Los Grimaldi nunca encontrarán el amor en el matrimonio", y aunque podría tratarse solamente de una leyenda, la verdad es que la situación de los miembros de la familia no ha sido la más próspera.

La princesa Carlota se casó con Pedro de Polingnac en 1920, fruto de ese matrimonio nacieron Rainiero III y Antonieta. Trece años después, según el escritor británico James Lees-Milne, la historia terminó en divorcio porque él era homosexual y ella tuvo romances extramaritales. Al final, Pedro fue desterrado por su suegro Luis II.

Los matrimonios de Antonieta y Rainiero III tampoco fueron 'felices para siempre'. No son un secreto los problemas que vivían continuamente el príncipe y Grace Kelly, quien tuvo una muerte prematura en 1982.

En el caso de su hermana, Antonieta, ella tuvo tres matrimonios. Primero se casó con Alexandre Athenase Noghés, quien ya tenía tres hijos, pero su unión sólo duró cuatro años. Después, llegó al altar nuevamente con el doctor Jean Charles Rey y estuvieron casados durante 10 años.

Su última boda fue con el bailarín John Brian Gilpin, quien murió de manera repentina sólo seis semanas después de la boda. Los hijos que Antonieta tuvo con Alexander también se han divorciado al menos en una ocasión.

Carolina de Mónaco y Ernesto de Hannover.

En cuanto a los hijos de Rainiero III,

y un matrimonio complicado. Su primer esposo fue Philippe Junot; luego Stefano Casiraghi, quien murió de manera trágica y, actualmente, aunque legalmente sigue casa con Ernesto de Hannover, la verdad es que su relación siempre fue muy complicada y desde hace algún tiempo viven por separado.

Estefanía de Mónaco tampoco ha tenido buena suerte en sus matrimonios. La primera vez que se casó fue en 1995 con Daniel Ducruet, de quien se divorció un año después. Lo mismo ocurrió con Adans Peres, su boda fue en 2003.

Daniel, Estefanía y Reiniero en la boda civil en Palacio de Mónaco.

Alberto de Mónaco tampoco ha tenido mucha estabilidad en el tema.

en 2011, el príncipe ya tenía dos hijos fuera del matrimonio, Jazmin Grace y Alexandre Coste, fruto de dos relaciones pasajeras.

Además, desde que se casó, han circulado rumores de divorcio pese a que oficialmente todo va de maravilla.

Esta imagen dijo más que mil palabras durante la boda de Charlène y Alberto.

Los únicos que parecen estar librados de la maldición son los hijos mayores de Carolina: Andrea Casiraghi lleva siete años de casado con Tatiana Santo Domingo y hasta la fecha no ha circulado ningún rumor de separación.

Pierre y Beatrice Borromeo tiene cinco años de estable matrimonio y Carlota, apenas cumplió su primer año de casada con Dimitri Rassam.

Retrato oficial de la boda de Carlota Casiraghi y Dimitri Rassam.

A ellos se une su primo Louis Ducruet, quien también acaba de cumplir su primer año de matrimonio con Marie Chevallier.

¿Será que la maldición se rompió en esta última generación?